Los trabajadores de la prensa en Venezuela han sufrido 162 ataques en los primeros seis meses del 2020 por parte de funcionarios de los cuerpos de seguridad del Estado y de los “colectivos”, considerados como grupos parapoliciales por activistas de derechos humanos, informó este miércoles la oposición.
En total, 85 de esos casos ocurrieron desde el 13 de marzo, cuando comenzó el estado de alarma decretado por Nicolás Maduro para frenar el covid-19, denunció Humberto Prado, nombrado por Juan Guaidó como comisionado para los Derechos Humanos y Atención a las Víctimas.
Según explicó Prado en una comparecencia y recoge un comunicado de su despacho, los trabajadores de la prensa han sido “amedrentados, detenidos ilegalmente y sometidos a desapariciones forzadas, lo que incurre en una seria violación de derechos fundamentales, principalmente, contra el derecho a la libertad de expresión”, entre otros.
“Son alarmantes los altos niveles de impunidad que existen en el país, las agresiones y la violencia a las que recurren los atacantes y, principalmente, el papel cada vez más activo que tienen los líderes del régimen usurpador, quienes haciendo uso de las instituciones y medios de comunicación públicos han fomentado la persecución contra la libertad de prensa”, dijo.
Entre los principales ataques sufridos por los comunicadores están las detenciones arbitrarias, los actos de hostigamiento y la censura de medios de comunicación.
Según Prado, en cada caso, el régimen de Maduro actuó de un modo diferente, ya que en ocasiones “permaneció pasivo e indiferente, demostrando su falta de voluntad para impedir la comisión de actos y sancionar a los responsables”.
En concreto, el informe que acompaña la denuncia de Prado muestra que, desde el inicio del estado de alarma y hasta el 30 de junio, han contabilizado 29 detenciones arbitrarias de trabajadores de la prensa.
Con información de EFE